El arte de discutir


Tarde o temprano, aún en los vínculos más queridos,d ebemos afontar momentos de desacuerdo, y es saludable poder expresarlos sin destructividad. Para logralo, es necesario dejar de lado las conductas repetidas... y que sólo conducen a más enfrentamiento.

¿Es posible vivir sin discutir, en un estado de enterna arminía? Los especialistas, afirman que no sólo es imposible sino, también, desaconsejable. Tragarse el enfado produce úlceras y otros trastornos,a demás de que enrarece el clima emocional dentro de nuesro entorno. Lo cierto es que no existe vínculo íntimo en el que ni se registren momentos de "alta tensión". Inevitablemente, la convivencia pone de manifiesto diferentes formas de pensar, de sentir y de hacer. Y de forma en que enfrentemos estos conflictos dependerà nuestra salud física y emocional.

Los cinco papeles: Cómo identificarlos

La víctima
Su principal característica es el reproche, la queja y el melodrama. La persona que se victimiza se siente el centro del universo en materia de injusticias sufridas.

El acusador
Lo rpimero que se le ocurre es defenderse atacando. Ataca yd esvaloriza al otro con infinidad de recursos y no oculta su carácter reconoroso.

El mudo

Su lema es matar callando, responde con monosílados, con oonomatopeyas con frases breves y terminantes, hasta que enmudece.

El racional
Al contarrio del mudo, prolonga la discusión con largas explicaciones y discursos, pero su distancoia emocional es un muro díficil de atravesar con palabras.

El apaciguador
Se hace el distraído, le da la razón al otro, finge disculparse, cambia de tema... Pese a estas actitudes, en los hechos mantiene su postura contra viento y marea. En apariencia, parece un moderador, alguien que tiene interés de llegar a coincidencias, de hallar puntos en común, pero es sólo una estrategia, un doble discurso,e n realidad termina aferrado a sus ideas.

¿Cual es la puerta de salida?
Es preciso concentrarse en el tema puntual sobre el que existe algúnd esacierdo, sin traer una larga lista de reclamos sobre hechos similares. De todas formas cada papel tiene su propio camino para encontrar la salida:
- Los mudos necesitan desarrollar su autoconfianza.
- Los racionales tienen que hablar menos y escuchar más.
- Las víctimas deben perderle el miedo al enfado.
- Los apaciguadores deben comprender que, cuanto más eludan la confrontación, más aislados quedarán.
- Los acusadores deben prohibirse a si mismos usar palabras denigrantes.

2 comentarios:

Jurema dijo...

Holaaaa....
Hace tiempo no te comento nada ,pero sigo visitándote cada día .
Me es de gran ayuda tu espacio!gracias.
Ha!Hoy te tomo prestado un post..

Muchos besitos

AnnaMArnau dijo...

Hola!!!
Me alegro de verte, muy feliz de tenerte como seguidora del blog!!
Para eso estan los post para ser tomados utilizado y puestos en practica.
Un beso y gracias!!